sábado, 22 de octubre de 2016

Brothers in Arms, combate táctico en la SGM



Reconozco que siempre he sido un fiel seguidor de la saga de 'Call of Duty', especialmente de las entregas centradas en la SGM. Pero la verdad es que hay un elemento clave que se echa de menos en estos juegos tipo 'Shoot'em Up' (o mata-mata, como los conocemos más por aqui) : les falta estrategia y táctica.

Es muy emocionante ver como 'Call of Duty' o 'Medal of Honor' recrean con todo lujo de detalles las míticas batallas de El Alamein, Stalingrado o Normandia y consiguen meterte de lleno en la acción a nivel de soldado raso, rodeado de decenas de compañeros y enemigos en asaltos épicos ... pero cualquiera que conozca mínimamente el mundillo bélico sabe que, en la guerra "real", la probabilidad de salir vivo del asalto a un nido de ametralladora y, de paso, llevarse por delante a más de una docena de enemigos era, cuando menos, casi nula y digna de condecoración.

En la inmensa mayoría de los casos, cada escaramuza entre pelotones de infantería solía llevar una mínima evaluación táctica por parte del líder de pelotón o de escuadra : análisis y reconocimiento del terreno, conteo de unidades enemigas,  búsqueda de posibles rutas para flanquear posiciones, fuego de cobertura, asaltos, etc...

Si lo que buscas es un juego que simule cómo eran de verdad los combates entre pelotones y escuadras de pequeño tamaño en la Segunda Guerra Mundial, 'Brothers in Arms' y sus diferentes secuelas son lo que estabas buscando.


El realismo es lo que prima


La intención de los desarrolladores de Gearbox Software no fue la de crear otro juego de disparos en primera persona más, sino de conseguir que experimentes (al menos en parte) las mismas sensaciones y decisiones que tuvieron que tomar los soldados en el teatro de operaciones de Europa, durante la SGM.

De entrada, partimos de la base de que los escenarios en los que se desarrolla la acción del juego están tomados de localizaciones reales de Normandía y Francia , para lo cual el equipo de desarrollo se desplazó directamente a dicha zona con el objetivo de tomar gran cantidad de material fotográfico y de vídeo, lo que ya de por sí supone un punto importante a tener en cuenta en terminos de realismo.

En segundo lugar, el hilo argumental se centra en la historia del sargento Matt Baker, durante los 8 primeros días de la Batalla de Normandía, comenzando desde el mismísimo Día-D. La historia, relatada a través de varias escenas cinemáticas a modo de diario, le da una componente novelesca al guión que también resulta muy atractiva.



Pero vayamos a lo que más nos interesa : la parte relativa a la simulación de combate, de la que hablábamos al principio de la entrada. En BiA sólo podemos controlar al protagonista (sargento Baker) en modo de "primera persona", y en este sentido lo que podemos hacer es muy similar a lo que ya hemos visto en otros juegos : desplazarnos, ponernos en cuclillas o de pie, coger diferentes armas, recargar... pero eso sí : ¡olvídate de disparar a más de 15 metros de un soldado alemán y acertarle en plena cabeza! Los programadores de Gearbox se han asegurado que el manejo de las armas en el juego reflejen "de verdad" lo difícil que era acertar al blanco cuando éste se encontraba en cobertura o cuerpo a tierra. Así que tendremos que "pensar" un poco más si queremos eliminar a esos granaderos que nos están fulminando desde lo alto de la carretera con su MG-42 y bien parapetados... y aquí es donde viene lo bueno.

jueves, 13 de octubre de 2016

Stalingrado 2013 : Espectáculo visual y poco más



Volvemos a la carga en el blog ,en esta ocasión con la versión más reciente de ‘Stalingrado’, la de 2013, de la que os puedo adelantar sin ningún tipo de reparo que no hace la más mínima sombra a la versión homónima alemana de 1993, de la que también hablaremos más adelante y cuyo único nexo de conexión con esta cinta rusa es que en ambas participa el convincente Thomas Kretchmann. Pero vayamos por partes, porque no todo es malo en esta película.

Si hay alguna razón que me invite vagamente a recomendar esta versión es su estética, y no me refiero únicamente a los efectos visuales, bastante logrados bajo mi punto de vista, sino por la estupenda fotografía y el ambiente casi de cómic que ha conseguido imprimirle el director, que contó con un presupuesto de más de 4 millones de dólares y un equipo de 400 personas para recrear las calles de la emblemática ciudad de Stalingrado durante su hora más oscura, la ocupación por parte del ejército alemán en 1942.

El argumento en si no guarda ninguna trama compleja:cuenta la historia de un grupo de soldados soviéticos que trata de defender la ciudad nombrada a propósito del mismísimo Stalin , aquella en la que usó por primera vez su horrible directiva “Ni un paso atrás“, por la cual se prohibía a los soldados abandonar las ciudades ocupadas por los alemanes, incluyendo también a los civiles atrapados, buscando así obligar a los soldados soviéticos a luchar con toda su determinación, ya que no sólo defendían su ciudad sino también a sus propias familias. Tras ocupar uno de los edificios frente a la famosa fuente de los niños (que hemos podido ver en otras películas similares como ‘Enemigo a las puertas’), el variopinto grupo de soldados compuesto por exploradores, artilleros e incluso marineros de la Flota Roja descubre a una muchacha que, tras pasar tremendas penurias, se resiste a abandonar su ya casi destruida casa, convencida que no le queda a donde ir.



Con el trasfondo de la batalla más sangrienta de la Historia, el guionista no se molesta en contarnos nada más, simplemente la supervivencia de estos soldados y su determinación para salvar a la chica. No hay tramas adicionales, ni tampoco flashbacks de los protagonistas hablando de su vida… Y la verdad es que lo he llegado a agradecer porque, en algún momento puntual de la película, una simple frase del tipo ‘me llamo Grigori y nací en una cabaña de los Urales’ me hubiera valido como pretexto suficiente para apagar la tele…

Como ya adelantaba, la parte técnica y visual son las que merecen la pena en la película. Y es que al margen de un par de secuencias al más puro estilo ‘Matrix’ y que bajo mi punto de vista están exageradas y sobran del todo, el resto de escenas de acción están muy logradas. Mención especial a las escenas de los rusos siendo atacados por los Stukas en el Volga, algunas escaramuzas en el edificio ocupado y la carga de los Panzers (que en realidad son T-34’s rusos magistralmente tuneados por los especialistas, ciertamente no se aprecian las diferencias a simple vista). Se abusa bastante de la cámara lenta en ocasiones, confiriéndole esa dinámica de vídeoclip a la película que ya se presagia cuando ves el tráiler, pero hasta cierto punto he llegado a tener la sensación que el director ha querido imitar deliberadamente el ritmo y la estética de ‘300’, solo que cambiando la batalla de las Termópilas por la de Stalingrado. Juzgad vosotros mismos viendo ambas en un corto espacio de tiempo.

martes, 27 de septiembre de 2016

Bernard Montgomery : El Mariscal del Desierto (I)

La figura histórica del General Montgomery quedará siempre ligada a la guerra en el desierto, al férreo carácter británico. a la disciplina, la doctrina y al arte de la guerra en su máxima expresión. Pero también quedará íntimamente unida a su eterno rival y némesis : Erwin Rommel, el único capaz de hacerle frente y que se convirtió en su máxima obsesión.




Fue el gran héroe de Inglaterra durante la SGM para muchos,mientras que para unos pocos fue sólo un oportunista que supo aprovechar las ocasiones para ganar fama y popularidad.. pero hay algo que no puede ponerse en tela de juicio : su figura dejó huella en todos aquellos que pasaron por su vida.

Una estirpe militar que comenzó 9 siglos antes, en Normandía


Bernard Law Montgomery nació en la metropolitana Londres, el 18 de noviembre de 1887. Su padre, Henry Montgomery, eligió la vida religiosa como profesión y se ordenó sacerdote anglicano. Su madre, Maud, mucho más joven que su padre y de carácter mucho más frío y estoico, tuvo una fuerte influencia sobre él.

Casi como de una profecía se tratara, resulta muy anecdótico saber que Bernard es descendiente directo de Roger de Montgomerie, segundo al mando de Guillermo I el Conquistador, quien partió precisamente desde Normandía en el año 1067 para invadir Inglaterra. La historia se repetiría a la inversa en 1944, cuando el general Montgomery lideró junto a otros comandantes la invasión Aliada de Normadía para abrir un segundo frente contra los nazis.

Bernard fue el cuarto hijo de la familia Montgomery, por aquel entonces afincada en Londres. A los dos años de su nacimiento su padre (cuya popularidad iba en aumento) fue nombrado obispo de la Tierra de Van Diemen, o Tasmania, en el otro extremo del mundo. En este exótico país es donde “Monty” pasó su niñez con todos sus hermanos, bajo la educación de una madre exageradamente estricta y religiosa.

Un rebelde sin causa


Esta férrea educación no consiguió el efecto deseado, y el joven Bernard se convirtió en un muchacho desobediente y no demasiado disciplinado, que incumplía una y otra vez los mandatos de sus padres.

En 1901 el obispo fue destinado de nuevo a Inglaterra, lo que obligó a desplazarse de nuevo a toda la familia. Asi pues, Monty volvió con 14 años a la capital del Imperio Británico, donde continuó sus estudios en prestigiosos colegios de la zona. Sus compañeros de clase le describirían, años después,  como un muchacho introvertido y sin demasiado apego por el contacto social, pero con una determinación y entrega absoluta por todo lo que hacía, y muy seguro de sí mismo. Sentía una verdadera pasión por los deportes, un terreno en el que era extraordinariamente competitivo : no pedía cuartel, ni se lo concedía a nadie.

Fue entonces cuando decidió decantarse por la vida militar, y entró en la prestigiosa Academia Militar de Sandhurst, en la que también se formaron otros líderes como Winston Churchill.


La prestigiosa academia militar de Sanhurst

Pese a su gran aptitud y desempeño (fue nombrado cabo en poco tiempo y destacó como lider en todos los deportes que se practicaban allí) el comportamiento de Bernard era desaprobado por los mandos de la academia. Sencillamente, chocaba de lleno con los instructores. Se volvió impopular por su arrogancia y su fuerte temperamento. Para colmo, se integró en un grupo de cadetes que solía gastar bromas y novatadas realmente crueles a los nuevos reclutas… en una ocasión, la novatada salió mal y el cadete en cuestión acabó en el hospital con quemaduras graves en el cuerpo..  lo cual provocó que estuviera a punto de ser expulsado de la academia.

Quizá el detonante que le hizo sentar la cabeza fue su exclusión para el nombramiento de sargentos : cuando se enteró de que no había sido incluido en el grupo de promocionados, arrancó sus galones de cabo y los arrojó al fuego, quedando degradado a simple cadete…

viernes, 23 de septiembre de 2016

La Delgada Linea Roja



Recientemente he tenido la oportunidad de volver a ver este clásico del cine bélico, del que mucho se ha escrito ya en los 17 años que han transcurrido desde su estreno; no podía faltar su correspondiente entrada en este blog de la SGM.

La Delgada Linea Roja, de Terrence Malick (1998) es una película que no te dejará indiferente, incluso si no eres seguidor habitual de este tipo de cine; principalmente porque cuenta con un reparto excepcional, plagado de buenos actores que podriamos decir que “orbitan” alrededor de tres actores centrales : Nick Nolte, Jim Caviezel y Sean Penn. Se ha llegado a decir que Sean Penn afirmó tener tanto interés en trabajar en una película de Malick que estaba dispuesto a no cobrar ni un céntimo por ello.

La trama se basa en la histórica Batalla de Guadalcanal, la cual fue trascendental en el teatro de operaciones del Pacífico, ya que fue en la isla del mismo nombre donde los americanos consiguieron frenar el avance japonés y tomar la iniciativa en esta zona, tras la batalla de Midway. Esta vuelta de tuerca no fue sencilla en absoluto, ya que los americanos tuvieron que sudar sangre para tomar la isla, en la que los japoneses ya habían iniciado la construcción de un aeródromo desde el que pudieran amenazar las rutas de suministro entre Australia, Nueva Zelanda y Estados Unidos.

A nivel histórico, poco más nos aporta la película, ya que la idea del director era centrarse precisamente en la violencia y las situaciones extremas a las que se enfrentan los soldados. Una de las grandes bazas con las que cuenta la cinta es la extraordinaria fotografía: la trama se desarrolla en una isla realmente idílica, de paisajes impresionantes, que contrastan de forma radical con la brutalidad y crueldad de las secuencias de acción. .. algo que el director (del que he de reconocer que no tengo el gusto de haber visto ninguna otra de sus peliculas) buscaba de forma intencionada para reforzar el mensaje de la deshumanizada y absurda que es la guerra.



‘La Delgada Linea Roja’ no es, de ninguna de las maneras, un ‘Salvar al Soldado Ryan’ en el Pacífico : al contrario que ésta, su mensaje de fondo es puramente antibelicista y exento de patriotismo (por mucho que me guste la película de Spielberg, he de reconocer que adolece del “exceso de banderas”). En este filme, Malick consigue que experimentes la ansiedad, el miedo, el nerviosismo de los soldados antes de lanzarse al asalto de una colina… gracias sobre todo al reparto de lujo con el que cuenta. Magistrales las interpretaciones de Nick Nolte (un general que ve la isla como la gran oportunidad de su vida para conseguir el ascenso que lleva años buscando y que considera las muertes de los soldados como pérdidas necesarias), Sean Penn ( un sargento de pelotón asqueado de la guerra) del sobervio Jim Caviezel (una suerte de desertor obligado a volver a su unidad y podría decirse que es el personaje central) y de Elías Koteas (en el memorable papel del capitán Staros plantándole cara a Nick Nolte para no sacrificar a los soldados de su pelotón).

Acompañando a estos 4 magníficos, destacan también Woody Harrelson, John Cusack, Adrien Brody (muy escueto en esta película), Jared Leto (que empezó a hacer sus pinitos en el cine por aquel entonces), John Travolta y George Clooney ( que estuvo a punto de pedir que lo excluyeran oficialmente de la película porque el director eliminó casi todas sus escenas en el montaje final).

martes, 20 de septiembre de 2016

Emperador : Juzgando a Hirohito


'Emperador' es una producción estadounidense que, a pesar de estar encuadrada en un contexto de postguerra, resulta muy interesante porque ayuda en gran medida a entender el papel de Japón en la Segunda Guerra Mundial y su política enormemente agresiva y expansionista.


La película narra la historia del General Bonner Fellers (Matthew Fox), un militar del Ejército de los Estados Unidos perteneciente al círculo de confianza del Comandante Douglas MacArthur (Tommy-Lee Jones),durante la la ocupación de Japón tras su derrota/rendición en el frente del Pacífico.

La acción transcurre en la ciudad de Tokio, totalmente devastada por los bombardeos. La primera tarea de MacArthur en los primeros dias de la ocupación es la de iniciar una investigación para arrestar a todos aquellos militares y políticos de la cúpula del gobierno japonés que sean sospechosos de haber cometido crímenes de guerra. Uno de esos sospechosos es nada más y nada menos que el propio Emperador Hirohito, a quien se le acusa de ser un instigador directo de la política belicista y de apoyar al ala más agresiva de la esfera militar del gobierno, encabezada por Hideki Tojo.

MacArthur encomienda a Fellers la delicada misión de investigar la verdadera culpabilidad del Emperador en la guerra y decidir, en ultima instancia, si debe ser juzgado por crímenes de guerra.


Matthew Fox interpreta al general Bonner Fellers

Para entender la enorme responsabilidad de esta tarea, es necesario comprender la verdadera imagen que se tenía del emperador en Japón en aquel entonces. Tal y como uno de los protagonistas japoneses le dice a Fellers, el Japón de los años 40´s tenía una imagen en el exterior tecnológica y militarmente muy superior a la de del resto de sus vecinos orientales. Sin embargo, los valores morales en los que se sustentaba el país seguían siendo exactamente los mismos que los del Japón feudal de la Edad Media : el honor seguía siendo lo más importante, y en medio de todo ello, el Emperador seguía siendo considerado como un Dios. Nunca se le veía en público, nunca hablaba directamente al pueblo, y todo ciudadano japonés debia dar la vida por él si llegado el momento era necesario. El emperador lo era todo para el pueblo, y todo acababa con él.

miércoles, 7 de septiembre de 2016

El Soldado Snafu



El slang (o jerga) militar es algo que todos conocemos de una forma u otra, sobre todo por palabras popularizadas por las películas de los 80`s como 'MIA' (Missed in Action, desaparecido en combate). Durante la Segunda Guerra Mundial, se acuñaron muchos términos y acrónimos para definir, mediante una sola palabra corta, situaciones de combate o  expresiones cotidianas de la guerra. Estos términos no eran oficiales, por regla general, hasta que su uso se hacía tan extendido entre los soldados que llegaba a adoptarse finalmente por los propios mandos del Ejército.

Tal es el caso de las palabras 'SNAFU', 'TARFUN', 'BOHICA' y 'FUBAR', siendo esta última las más conocida porque fue llevada al cine por Spielberg en "Salvar al Soldado Ryan" (aunque en la versión en castellano de dicha película, la palabra que se usó traducida fue 'FOMARE'). Los significados de estas expresiones son (de forma aproximada) :

- SNAFU : Situation Normal : All Fucked Up --> "Situación Normal : Todo Jodido". Se usaba cuando la situación era la misma, sin novedades que reportar... dentro de la "gravedad" de la situacion.

- TARFUN : Things Are Really Fucked Up Now --> "Las cosas están realmente jodidas ahora". Se usaba cuando la situación se había torcido y complicado sobremanera.

- BOHICA : Bend Over! Here It Comes Again --> "Agáchate que viene otra vez!", en alusión a aquellos momentos en los que les estaban "dando duro" y no quedaba otra que aguantar (con una clara connotación soez...).

- FUBAR : Fucked Up Beyond All Recognition : "Jodido/hecho mierda más allá de todo reconocimiento" , que se explica prácticamente por sí sola.

Lo cierto es que algunas de estas palabras se hicieron tan frecuentes, que la Primera Unidad de Películas de Animación decidió crear un personaje de dibujos animados utilizando el término SNAFU, jugando o sustituyendo sutilmente durante la intro la palabra "fucked up" por "fouled up" (echado a perder).



Nació asi el soldado SNAFU, un recluta realmente patoso, zoquete, irresponsable y despreocupado que hacía todo exactamente como no había que hacerlo... la idea era mostrar a los soldados de una forma distendida y divertida cómo evitar caer en errores típicos de novato, o como recordatorio para temas de confidencialidad, seguridad, higiene, prevención de enfermedades... La idea era precisamente hacer llegar estas directrices a aquellos soldados que no eran muy duchos (o interesados) en la lectura, motivándoles con vídeos de entretenimiento durante sus horas de ocio en los barracones.

viernes, 2 de septiembre de 2016

The Bomber



En los últimos años, el cine ruso está contribuyendo al género bélico de la Segunda Guerra Mundial con algunas producciones que parecen intentar seguir la estela de filmes de carácter épico como 'Salvar al Soldado Ryan', si bien es cierto que todavía distan mucho de ser auténticos blockbusters. Tal es el caso de películas como 'White Tiger' o 'Stalingrado' en su versión de 2013.

Hay que reconocer que es un cine diferente al que estamos acostumbrados a ver, pero últimamente empieza a tomar tintes muy interesantes para los aficionados a la SGM y, más concretamente, en el frente oriental (el más sangriento y encarnizado de toda la contienda y en el que más medios humanos y militares se dispusieron), principalmente por la capacidad de poner en escena "unidades" que no hemos podido ver en otras películas . La Gran Guerra Patriótica sigue siendo hoy en día motivo de orgullo e inspiración para la sociedad rusa, precisamente por su carácter patriótico, en estos tiempos en los que los rusos parecen deseosos de reforzar su identidad.

The Bomber nos trae la historia del capitán Andrey Grivtsov, un piloto soviético cuyo bombardero es derribado en plena zona ocupada por los nazis. Junto a su compañero, el teniente Georgiy Linko (quien ejerce de némesis moral de esta historia), sufrirán distintos destinos: uno deberá escapar de las patrullas de ocupación y contactar con la resistencia compuesta por los míticos partisanos, mientras el otro será apresado e internado en un campo de prisioneros, donde la inteligencia alemana le obligará a actuar de agente doble y a traicionar a sus compañeros para salvar su propia vida.




En medio de esta aventura, aparece la novia del protagonista, Katya, una operadora de radio cuya misión es saltar con otros paracaidistas en territorio ocupado y contactar con la resistencia para realizar transmisiones de enlace. Katya acabará encontrandose con Andrey y juntos emprenderán la huida para cumplir sus respectivas misiones.

sábado, 27 de agosto de 2016

Nachtjägers : visión nocturna en la WW2



Es un hecho ampliamente conocido que el desarrollo de la tecnología militar fue una de las máximas de Hitler y la Alemania nazi. La superioridad del ejército alemán, al menos durante los primeros años de la guerra, no  vino dada exclusivamente por el excelente entrenamiento de sus tropas y por las innovadoras tácticas de la Blitzkrieg. Casi desde el final de la Primera Guerra Mundial, los generales de la Wehrmacht (lejos de asumir la derrota y tirar la toalla de cara al futuro) tuvieron muy claro que el dominio en el campo de batalla en el futuro próximo iba a estar determinado por el bando que dispusiera de una mejor tecnología ... y se pusieron manos a la obra casi de inmediato.

Esa superioridad tecnológica quedó patente en los pioneros diseños de los tanques Panzer (en especial los Tiger I y II), de las bombas V1 y V2 (cuya tecnología, de la mano del científico Werner von Braun, sentaría paradójicamente las bases para los misiles balísticos y los vuelos espaciales de las décadas venideras) y de aviones extraordinariamente avanzados para su época, como lo fue el Messerschmitt Me-262, el primer caza de combate a reacción de la Historia (con permiso del británico Gloster Meteor, que nunca llegó a entrar en combate),  o del inconcebible diseño basado en un cohete del Messerschmitt Me-163 que bien podría haber cambiado el curso de la guerra si los alemanes no hubieran tenido tantos problemas logísticos y de organización al final del conflicto.

De entre los muchos avances científicos y militares que se derivaron de esta enorme conflagración a escala mundial, uno de los que más ha llamado mi atención es el FG 1250, el primer sistema de visión nocturna por infrarrojos. Me resultó bastante impactante que el desarrollo de esta tecnología se hubiera producido durante la SGM, puesto que tenía el pleno convencimiento de que era mucho más reciente.

Vamos a ver cómo surgieron estos dispositivos y cómo se usaron realmente.




No hay que ser un estratega para darse cuenta de que la posibilidad de desplegar operaciones ofensivas durante la noche supone una ventaja táctica destacable. Hasta los años 30, esa opción estaba limitada al uso de focos enormes y bengalas de magnesio, que fueron ampliamente utilizadas también durante la Primera Guerra Mundial. No obstante, las bengalas iluminaban todo el terreno (revelando también las posiciones de quienes las lanzaban) y ardían sólo por un corto espacio de tiempo. Lo que de verdad era necesario era desarrollar la capacidad de ver sin ser vistos.

Fue en la década de los años 30 cuando el desarrollo de campos como el de los osciladores y los tubos de rayos catódicos hicieron posible la implementación de los primeros dispositivos de visión nocturna. La empresa a cargo del proyecto fue AEG (General Eléctrica Alemana), que para 1935 había completado ya con éxito su primer prototipo de visión por infrarrojos... sin embargo, la Wehrmacht demostró poco interés por él en ese momento, al no ver una aplicación militar directa.


Como de costumbre, las necesidades del campo de batalla eran las que definían las prioridades de investigación, y para 1943 el Frente Oriental suponía una autentica pesadilla para los alemanes, ya que los soviéticos acostumbraban a lanzar ataques durante la noche. El coronel Guderian, viendo el potencial de este nuevo dispositivo, impulsó su desarrollo, consiguiendo que a finales de ese mismo año viera la luz la mira FG 1250, equipada con un foco de infrarrojos de 30 cm de diámetro... este foco resultó pequeño y fue en poco tiempo sustituida por una de 60 cm; el dispositivo completo fue montado en un semioruga Sd Kfz 251.





El problema de fondo, como suele ocurrir siempre, es que la producción de estas miras era extremadamente cara, como ocurre con todos los avances en armamento hasta que se consigue su industrialización... por este motivo, la producción en "masa" (aunque el volumen total de dispositivos creados fue realmente muy pequeño) no ocurrió hasta mediados de 1944.

¿Cómo funcionaban estos visores?


El funcionamiento en sí es bastante sencillo : todo se basa en el tándem foco infrarrojo - visor.

El foco (alimentado normalmente por 12v y basado en la típica y convencional bombilla estándar de tungsteno) lleva un filtro que permite sólo el paso de luz infrarroja (IR), invisible para el ojo humano, mientras que el visor "recibe" la luz IR reflejada por el objetivo y la convierte en imágenes visibles para el que está manejando el dispositivo... de hecho así es como operan, en esencia, los visores IR modernos. El foco IR solía tener un alcance medio de unos 600 metros, dependiendo de su tamaño.



Aquí podemos ver el visor IR FG 1250 montado en la cúpula de comandante de un Panzer (a la izquierda), junto al foco IR.
Los informes de batalla que evidencian su uso real en combate son muy escasos y dispersos... pero lo que sí sabemos es que los alemanes habían ideado 2 configuraciones distintas :

La primera de ellas se basaba en la instalación de  un visor y un foco en la cúpula del comandante de un tanque Panther, lo que permitía girar la mira 360º, pero poco tiempo después se hizo común el uso combinado de 2 vehículos : un tanque Panther equipado con el visor, y al menos un semioruga Sd Kfz 250 que portaba un foco de mayor tamaño en su zona de carga (ver imágenes más arriba). Así pues, la táctica usada era que los semiorugas iban "iluminando" las zonas en las que se sabía que estaba el enemigo, mientras los tanques Panther identificaban al objetivos y disparaban con sus cañones... y todo esto en plena noche, sin necesidad de luz normal alguna.

La segunda solución aportaba mucha más autonomía a los Panthers,  ya que dotaba de un combo completo de visor IR + foco IR de 30 cm al conductor, al artillero y al comandante (3 dispositivos en total) prescindiendo del foco del semioruga y permitiendo al conductor poder moverse en condiciones de visibilidad nula durante la noche. Pese a que esta solución era mucho más mortífera por las posibilidades que planteaba, el elevado coste de tener que montar 3 unidades por tanque hizo que no llegara a usarse en combate real.

Como ya hemos indicado,  pocos informes de batalla mencionan el uso de esta tecnología por parte de los alemanes (quizá se usó más de lo que se cree y no se documentó), pero se tiene constancia de que se desplegaron varias unidades Panther con visores IR en al menos dos zonas : en las Colinas de Seelow antes de la Batalla de Berlín y, sobre todo, en el Frente del Este, en la zona de Hungría. Parece ser que Guderian habia recibido información de que Estados Unidos y Gran Bretaña contaban ya con armas que podían detectar el uso de IR, por lo que preferió usarlo casi exclusivamente contra los soviéticos.

Pero lo más sorprendente de todo es que los alemanes también consiguieron adaptar la mira para su uso por parte de la infantería, para lo cual se creó una mira especifica llamada ZG 1229, a la que le pusieron el acertado sobrenombre de "Vampir" (vampiro).






La mira Vampir llevaba un pequeño foco de unos 12 cm de diametro montado justo encima, de menor alcance que los de la FG 1250, pero suficiente como para detectar objetivos y fijar el fuego sobre ellos. Ambos elementos iban alimentandos por un par de grandes baterías (una para el visor y otra para el foco) que el soldado llevaba en una especie de mochila. El conjunto completo pesaba casi 15 kilos en total.

El Vampir se adaptó casi específicamente para el fusil de asalto Mp-44, si bien se conoce que también se usó de manera puntual con ametralladoras MG-34 y MG-42. A los soldados que portaban estos dispositivos se los conocía como Nachtjägers (cazadores nocturnos), siendo desplegados en la mayoría de ocasiones como francotiradores que hostigaban a los pelotones soviéticos del Frente del Este durante la noche.

viernes, 26 de agosto de 2016

Gueorgui Zhukov : El Mejor General de la URSS

El destino de la Unión Soviética no hubiera sido el mismo de no ser por personajes como él. Fue uno de los mejores comandantes de la Segunda Guerra Mundial, un autodidacta, un superviviente de las purgas del comunismo y del propio Stalin, la pesadilla de las divisiones nazis que invadieron la madre patria y, ante todo, un estratega excelente que supo frenar el avance ruso en el corazón de Rusia y darle la vuelta a una guerra que parecía perdida para los comunistas, convirtiendo una operación de defensa en una imparable contraofensiva hasta el Reichstag de Berlín, que acabó anexando media Europa a la URSS.



Un héroe de origen humilde.


Zhukov nació en 1896 en la región de Kaluga, en el seno de una familia pobre dedicada al campesinado, como la inmensa mayoría de las familias de la época, en una Rusia regida y dirigida por los designios de Nicolás II, el último zar. Fue este entorno de pobreza, trabajo y supervivencia el que forjó la identidad y el carácter de Zhukov, quien se prometió a si mismo que conseguiría un futuro digno. A pesar de las dificultades, sus padres se aseguraron de que recibiera una formación básica en la escuela.
Con tan solo 10 años, Zhukov pasaba ya 12 horas trabajando en la fábrica de su tío, donde se veía obligado a pasar las noches durmiendo en el suelo.

Precisamente, estos orígenes de humildad fueron uno de los principales recursos de su carrera como político y militar en la Unión Soviética, que supo aprovechar para escalar posiciones al presentarse como el modelo de auténtico comunista.

En 1915, un año después de estallar la Primera Guerra Mundial, la vida de Zhukov dió un giro inesperado al ser reclutado con 19 años. Ingresó en una división de dragones (caballería), en la que demostró su valor y habilidad y fue ascendido a oficial no comisionado, recibiendo dos veces la Cruz de San Jorge.

“Es mi turno. Voy a luchar lo mejor posible pues soy leal a mi país”. Zhukov durante la Primera Guerra Mundial, poco antes de mostrar su lealtad al Ejército Rojo. A la derecha, soldados rusos partiendo hacia el frente.

Sus antecedentes militares y sobre todo su pasado campesino le sirvieron para evitar que el Ejército Rojo, tras la Revolución de Octubre,  pusiera el dedo sobre él y lo matara, tal y como ocurrió con muchos otros oficiales del ejército zarista a los que la Revolución Soviética "purgó". Tras recuperarse del tifus que había contraído durante la guerra, y ya integrado plenamente en la Revolución, recibió también la Orden de la Bandera Roja, llegando a General de brigada en 1930.

martes, 23 de agosto de 2016

Independence Day: Contraataque ... Un Desastre Absoluto


Normalmente mis entradas tienden a (e incluso pecan de) mostrar un carácter de valoración positiva, sobre todo en las referentes al cine y a las series que sigo. Y esto se debe al hecho de que concebí este blog con la idea de hablar de cosas que me gustan, evitando en la medida de lo posible las críticas destructivas... pero mucho me temo que ese no es el caso de esta entrada. 

Hoy vengo a expresar mi malestar y mi enorme cabreo por ese "intento" de segunda parte (y a la postre y muy previsiblemente trilogía) que Roland Emmerich ha dirigido. 'Independence Day : Contraataque' (en adelante y para acortar, ID2) no es sólo una mala película... Es una forma ridícula de destrozar la historia de la cinta original de 1996 que tanto me gustó siendo un adolescente.


ATENCIÓN : Esta entrada contiene un alto nivel de spoilers y no deberías leerla si tienes intención de ver la película (aunque te recomiendo que no lo hagas).













He de reconocer que la idea de una segunda parte de ID me parecía buena. Ahondar un poco más en el origen de esos perversos alienígenas que habían lanzado la mayor invasión cinéfila de la historia (si, admitámoslo... después de ID no hubo nada tan épico, por mucho que lo intentaran 'Battle los Angeles' ,'Skyline' y 'Battleship') era algo que todos los fans de la primera película siempre quisimos, ya que quedaban muchos frentes abiertos que daban pie a más de una secuela. De hecho, me sorprendió que Roland Emmerich no aprovechara el tirón de la primera parte para lanzar una segunda al poco tiempo de su estreno, pero viendo que tampoco lo había hecho con la mítica 'Stargate' no me extrañó en exceso ... Al fin y al cabo, lo que a Emmerich le atrajo posteriormente fue el cine de catástrofes, puro y duro (véanse '2012' o 'Godzilla')

El caso es que 20 años después, siendo ya algo maduritos los que vimos la pelicula original, viene el bueno de Roland y decide seguir con la historia relatándonos cómo la humanidad se ha preparado para un más que previsible contraataque de esos belicosos aliens que estuvieron a punto de barrernos del mapa con su tecnología basada en escudos protectores y armas de destrucción masiva.




De entrada, el proyecto ya contaba con una carencia importante : Will Smith no iba a participar. Se ve que ya se olía que esto iba a ser un auténtico borrón en su carrera, o quizá (más probable aun)  que su caché a estas alturas es demasiado alto para el presupuesto con el que contaba el filme...fuera lo que fuera, más le hubiera valido al amigo Roland haber dedicado parte de los fondos a 'captar' a Smith. Y el motivo es bien sencillo (y aquí viene la primera crítica) : con el permiso de Jeff Goldblum, no hay ni un solo actor que lo haga medianamente bien en esta secuela. La interpretación ralla en el absurdo, una auténtica basura. Verdaderamente hacia tiempo que no veía actuaciones tan malas, incluyendo a Bill Pullman, que ha pasado de un aceptable trabajo como abnegado presidente de Estados Unidos en la primera a desinflarse por completo en la segunda, sin pena ni gloria y con un desarrollo realmente pobre, repitiendo además su hazaña patriótica de hacer de piloto de combate en los momentos más críticos, a pesar de estar retirado y en tratamiento psiquiátrico... apoteósico, vamos.

domingo, 31 de julio de 2016

Garbo : el agente doble español que engañó a Hitler

La Operación Overlord,  la mayor y más compleja operación militar de todos los tiempos, no hubiera tenido éxito sin el arriesgado trabajo de “desinformación” de decenas de agentes secretos que actuaban en la sombra lo largo de toda Europa. De todos estos espías, hubo uno que desempeñó un papel fundamental, consiguiendo engañar al propio Hitler sobre la zona en la que se iba a realizar el Desembarco de Normandía… se trataba de un agente español, llamado Joan Puyol, y cuyo nombre en clave era “Garbo”.



De vocación : agente secreto

Joan Puyol nació en 1912 en Barcelona. Su padre, que mantenía una posición económicamente acomodada, ejerció una gran influencia en él, transmitiéndole su rechazo por la violencia y su creencia en el progreso y la tolerancia. A Joan le tocó vivir en una época de convulsión revolucionaria en Barcelona durante los primeros meses de la Guerra Civil Española, donde los radicales métodos de las facciones comunistas y anarquistas le hicieron pasarse al bando franquista durante la contienda.Sin embargo, no tardó mucho tiempo en darse cuenta de que se había equivocado y comenzó a sentir también un rechazo aún mayor por el fascismo, no solo por la brutal represión ejercida por Franco sobre los vencidos, sino por su apoyo a la Alemania nazi, que acababa de desencadenar la Segunda Guerra Mundial.Así pues, en 1940, año en el que Hitler ponía todo su empeño en la invasión de Inglaterra, nuestro héroe particular decide que ya es hora de hacer algo para ayudar a los británicos, puesto que éstos eran los únicos que estaban luchando contra Alemania en aquel entonces.

Es así como Puyol, un pequeño empresario que se había dedicado primero a criar pollos y luego a dirigir un hotel en Madrid, decide de la noche a la mañana convertirse en espía y agente secreto para luchar contra los nazis, sin la más mínima formación para ello ni el conocimiento de otros idiomas más allá de su catalán nativo y el español…

Joan Puyol y su esposa, Araceli González, la espía en la sombra

Ni corto ni perezoso, Joan envía a su mujer, Araceli González (quien también llegaría a convertirse en espía junto a él y a quien muchos autores atribuyen parte del éxito de Puyol) a la embajada británica en Madrid, para  que ésta ofrezca allí a los ingleses los servicios de su marido como espía. Prácticamente la mandaron a paseo, tras revisar el perfil de Puyol y ver que carecía de interés estratégico…Ante la negativa, Puyol pone en marcha su “plan B” para encontrar ese valor estratégico que buscan los británicos : decide ofrecerse como espía a los nazis, con la intención de hacerse un nombre en el Servicio de Inteligencia de los alemanes y, a la larga, poder pasar información valiosa a los ingleses.

sábado, 30 de julio de 2016

El día más largo



Antes de que comiences a leer esta entrada, hay algo que debes saber: si eres aficionado a la Segunda Guerra Mundial o al género bélico y todavía no has visto 'El día más largo', debes colocar esta película en el primer puesto de tu lista de "pendientes de ver".


No recuerdo exactamente en qué momento de mi vida comencé a sentir curiosidad por este apasionante mundo de la 'Gran Guerra Patriótica' como la llamaban los soviéticos; pero echando la vista atrás (muy atrás! ), creo que es muy posible que todo comenzara en el verano de 1989, cuando fui con mi padre por primera vez al cine y tuve la oportunidad de ver aquella irrepetible peli de aventuras llamada 'La Última Cruzada', donde oí hablar de unos tipos muy malos llamados 'nazis' que intentaban encontrar el mismísimo Santo Grial para ganar una guerra... fue mi padre quien me dijo que esos 'tipos malos' habían existido en la realidad y no mucho tiempo atrás. Así que es muy posible que ese fuera el "germen" de todo.

Batallitas aparte, lo cierto es que mi interés surgió claramente a través de filmes de producción más moderna o, mejor dicho, reciente. 'Salvar al Soldado Ryan' marcó el punto de inflexión en mi forma de ver el cine bélico. Después llegó 'Enemigo a las puertas', y de ahí pasé a devorar todos los documentales que pasaban por mis manos, empezando por la fabulosa serie de 'El mundo en guerra'.

Os cuento todo esto porque, hasta hace relativamente poco, tenia tendencia a pensar que las películas antiguas de la SGM no tenían ni la calidad ni el rigor histórico de las actuales... y ahora, tras muchos años de cine bélico,  me he venido a dar cuenta de que no podía estar más equivocado. De hecho, lo primero que pensé al ver 'El día más largo' fue "¿por qué no la he visto antes?"

En resumen, os diría que son muchos los puntos que suman a favor de esta 'masterpiece', pero yo particularmente me quedo con los siguientes tras mi primera visualización de la peli (que seguro que no será la ultima):

Un gran despliegue de medios




Los 10 millones de dólares (de los años sesenta) que invirtió la 20th Century Fox en esta película se aprovecharon a conciencia: he podido ver Shermans, planeadores (gliders), bombarderos, bunkers muy fidedignos, lanchas de desembarco LVT, ingenieros, cañones antiaéreos, uniformes muy detallados y, sobre todo, muchos, muchos extras, como se hacía en las grandes superproducciones de aquel entonces (admitámoslo, se nota la diferencia frente a los "ejércitos digitales" a las que estamos ya acostumbrados, y que usan solo unos pocos extras frente a una pantalla verde). Todo en la película está concebido a lo grande, incluso las escenas en las que Rommel hace acto de presencia en Normandia para organizar las defensas, y en las que podemos ver a cientos de alemanes construyendo el famoso muro del Atlántico.

domingo, 24 de julio de 2016

Space Agency : crea tu propia agencia espacial


 

Hoy quiero hacer una breve reseña sobre un juego para iOS y Android que me ha sorprendido mucho... es más, diría que a día de hoy es el único juego para plataformas móviles que ha conseguido engancharme de verdad, por sus grandes dosis de realismo, jugabilidad y complejidad.


Me confieso abiertamente como un gran aficionado a los wargames y a los juegos de mesa, y fue precisamente escuchando un podcast dedicado a este mundillo como descubrí recientemente el fabuloso High Frontiers, posiblemente el mejor boardgame que existe sobre exploración espacial, donde cada jugador (hasta un máximo 5) toma el papel de una agencia distinta (NASA, ESA, UN...) para competir en una intensa carrera por la exploración y colonización del Sistema Solar, investigando y pujando por nuevas tecnologías, ensamblando cohetes en la órbita de la Tierra y calculando (literalmente) las maniobras y los tanques de combustible necesarios para llegar a la Luna, a Marte, a un asteroide... El juego es tan interesante que merece una reseña aparte en el blog.

Pues bien, viendo que High Frontier no está actualmente disponible  (tengo entendido que se está trabajando en una tercera edición) decidí lanzarme a la búsqueda de algún juego online o para tablets que pudiera suplir, al menos en parte, a su "hermano mayor" de tablero... y fue entonces cuando me encontré con esta pequeña joya.

Hablemos claro : no esperes gráficos impresionantes, ni tan siquiera buenos. En Space Agency lo que prima es la jugabilidad, el aprendizaje y también un poco de pericia. Si lo que buscas es un juego de estas características pero con buenos gráficos (algo que, por otro lado, también se espera en programas de este género) hay otras alternativas como el Buzz Aldrin's Space Program Manager, un juego para PC mucho más completo y posiblemente uno de los mejores de este género.




Pero vayamos al grano : lo primero que nos encontramos en el menú principal es un tutorial con varias misiones que nos van a ir enseñando, paso por paso, todas las maniobras y acciones que vamos a necesitar después en el modo "Carrera" (lo que en otros juegos llamaríamos "campaña"): desde ensamblar nuestro primer cohete módulo por módulo, ponerlo en órbita, realizar maniobras de atraque en la estación espacial, cambios de órbita, "rendezvous", reabastecimientos, reentrada en la Tierra... y todo ello acompañado de videos en los que nos explica cómo hacerlo, usando propulsores, motores, paneles de navegación, de energía...


jueves, 21 de julio de 2016

Wings of Prey : Batallas aéreas de la Segunda Guerra Mundial

¿Alguna vez has querido experimentar lo que sentía un piloto de la RAF a los mandos de un Spitfire en plena Batalla de Inglaterra? ¿O dirigir un escuadrón de bombarderos sobre Berlín mientras el fuego antiaéreo y decenas de cazas nazis Bf-109  intentan derribarte? Entonces Wings of Prey es el juego que estabas buscando.




Wings of Prey es un estupendo trabajo de la desarrolladora Gaijin Entertainment que mezcla dos conceptos de los que soy un fan incondicional : la Segunda Guerra Mundial y la simulación de vuelo. Así que no me costó mucho lanzarme a por él cuando lo ví en la tienda.

Sí... sé perfectamente que el género está un poco "explotado" y que quizá a estas alturas ya hay poco que aportar en este tipo de juegos, salvo gráficos mas espectaculares. Pero ahí os dejo unas cuantas razones por las que merece la pena:


Espectacular en todos los aspectos


Si me pidieran una sola palabra para definir Wings of Prey, diría que, ante todo, es un juego ÉPICO.
Tras un tutorial de vuelo bastante completo (y lo más importante para mi : relativamente breve y que no sobrecarga con excesivas instrucciones), empiezas el modo campaña en Inglaterra a los mandos de un Hawker Hurricane de la Royal Air Force. Tu misión : defender la legendaria ciudad de Dover de las oleadas de bombarderos nazis.




A partir de este momento, la espectacularidad va en aumento. Escuchas por la radio los comentarios de tus compañeros de patrulla mientras sobrevuelas la ciudad y el puerto. Olvídate de ciudades gráficamente pobres, planas o texturizadas y de terrenos de mala calidad : aquí directamente puedes volar a ras de tejados de casas perfectamente definidas, y casi notar el golpeo de las ramas de los árboles. La música es suave, perfectamente sincronizada con la escena que estás viviendo.

Y entonces llega el gran momento. Tu enlace en tierra anuncia un bombardeo inminente detectado por el radar y escuchas claramente las sirenas de alarma en la ciudad. Tu escuadrón enfila el puerto y el Canal de la Mancha, en formación de ataque. De repente, aparecen decenas de bombarderos Heinkel He 111 de entre las nubes, escoltados por una miríada de los míticos cazas Bf-109.

martes, 19 de julio de 2016

The Red Ball Express

Existe una máxima militar que dice "los aficionados hablan de estrategia, mientras los profesionales hablan de logística"... y lo cierto es que pocas frases reflejan una verdad castrense tan absoluta. La logística, entendida como la organización necesaria para llevar todo aquello que los ejércitos en campaña necesitan para su plena operación y rendimiento, es aún más importante en multitud de ocasiones que la propia táctica empleada. De nada sirve planificar un ataque magistral sobre el enemigo si no eres capaz de llevar armas, munición y (sobre todo) petróleo a las unidades que lo necesitan, no sólo a tiempo sino con la frecuencia necesaria para que sigan avanzando y puedan mantener las zonas ya ocupadas. Y no hablemos ya de lo más clave : la comida... porque como decía Napoleón : "Un ejército avanza sobre su estómago". Esta entrada supone mi primera aproximación a la logística de guerra.



En Agosto de 1944, el general Patton dejaba otra de sus grandes frases para la posteridad: 'Mis hombres son capaces de comerse sus cinturones, pero mis tanques necesitan gasolina". Reflejaba así uno de los principales problemas a los que se enfrentaban los Aliados tras el éxito del desembarco de Normandía: por un lado, tanto la aviación Aliada como la Resistencia Francesa había destruido casi por completo la infraestructura ferroviaria del Oeste de Francia, para evitar que los alemanes pudieran responder rápidamente a la invasión desplazando a la infantería en tren (como era habitual); por otro lado, estaba el problema de que el avance Aliado había superado todas las expectativas del alto mando, ya que se esperaba que los alemanes defendieran con uñas y dientes cada accidente geográfico hasta París (al igual que habían hecho meses antes en Italia), pero la realidad fue que los alemanes se habían batido en retirada para reagruparse posteriormente.

A causa de esto último, el Primer Ejército de Hodge y el Tercer Ejército de Patton avanzaban hacia el interior de Francia a una velocidad totalmente inesperada, provocando que las líneas de suministros, que en ese momento llegaban directa y únicamente a la cabeza de playa de Normandía, se estiraran cada vez más. Para poder mantener este "momentum", se hizo necesaria la organización urgente de un sistema de convoys de transporte lo suficientemente grande como para transportar la enorme cantidad de recursos para el titánico consumo diario de ambos ejércitos en avance.

El Red Ball Express (nombre que bien puede parecer el de una banda de 'swing' de la época) fue simplemente el nombre que se le dio a un sistema de convoys de camiones de suministro operando entre las ciudades de Saint Lo y París, desde Agosto hasta Noviembre de 1944. La idea inicial era que el transporte de suministros se iba a basar en la combinación de tres medios : por tren, por carretera y por tuberías. El transporte por lineas de tuberías (pipelines, como lo llaman los americanos) era la manera más eficiente de transportar el fuel a puntos más avanzados del interior; de hecho, el transporte del combustible hasta las playas de Normandía se había logrado gracias a la operación PLUTO (PipeLines Under The Ocean), un oleoducto que bombeaba petróleo directamente desde Inglaterra y que atravesaba el Canal de la Mancha para evitarlos ataques de submarinos alemanes

Una sección de las tuberias del sistema PLUTO

domingo, 17 de julio de 2016

El Desafío de las Aguilas


En mi pequeña cruzada por visionar todos los clásicos del cine bélico (y no tan clásicos) me he topado con esta genial superproducción de los años sesenta, no exenta por supuesto de algunos fallos, pero que en conjunto supone una excelente experiencia para los amantes del género.


'El Desafío de las Aguilas' o 'Where Eagles Dare' en su título original, es la adaptación cinematográfica de la novela del mismo nombre de  Alistar MacLean, escritor y veterano de la SGM a quien también le debemos otras obras como 'Los Cañones de Navarone', y quien escribió al mismo tiempo el libro y el guión de la película que nos ocupa.

La trama se centra en un comando anglo-americano, formado por varios oficiales de élite, que es enviado al corazón de Austria, tras las lineas enemigas, para rescatar a un general americano apresado por los alemanes tras un accidente de avión, antes de que éste revele los planes aliados para el desembarco de Normandía... un argumento muy atractivo, ya de por si. Lo cierto es que resulta complicado realizar una sinopsis de esta película, pero se podría resumir como una historia a medio camino entre el thriller de espionaje y el cine de aventuras con una fuerte componente de acción bélica que a muchos de los ochenteros nos recordará, sin lugar a dudas, a las películas de Rambo (aunque ya os adelanto que  Rambo se quedaría bien corto frente a los dos protagonistas de esta cinta... ahí lo dejo).

Y como una imagen vale más que mil palabras, echémosle un vistazo a este cartel promocional de la película, que sin llegar a ser un spoiler nos da una buena idea de lo que nos espera durante las casi 2 horas y media de metraje :

lunes, 27 de junio de 2016

Dora, el cañón más grande de la historia

¿Cuál sería tu respuesta si te preguntaran por un arma de 1350 toneladas de peso, 50 metros de largo y una dotación de 1500 efectivos?  Posiblemente pensarías que se trata de un destructor, un portaaviones o incluso un acorazado. En este caso, la respuesta no es tan obvia :  son las características de Dora, el súper cañón construido por los nazis durante la guerra y el mayor desarrollado hasta nuestros días.




La madre de todas las piezas de artillería


La megalomania de Hitler y su plana mayor no sólo se reflejaba en su deseo de remodelar la ciudad de Berlín con edificios de características titánicas, sino que quedó especialmente patente en el diseño y desarrollo de armas super-pesadas, como el tanque Tiger II (el de mayor blindaje y potencia de fuego de la IIGM), el acorazado Bismarck o el mortero autopropulsado Thor.

Dora, o más concretamente el cañón 80-cm Eisenbahngeschütz , fue concebido como un cañón de asedio de gran calibre (800 mm), orientado a operaciones de sitio de ciudades y bombardeo estratégico de fortificaciones y lineas de defensa del enemigo, con una potencia de fuego superior a la de cualquier batería de artillería existente.

miércoles, 15 de junio de 2016

La Medalla Dickin : Animales Heróicos

Perros paracaidistas de élite, palomas mensajeras que llevan información vital y gatos marineros que mantienen la moral de la tropa alta : ellos también pueden llegar a ser auténticos héroes. La medalla Dickin nació para rendirles tributo.




En plena Segunda Guerra Mundial y en una Europa arrasada por las batallas, los actos de heroismo de soldados y civiles se sucedían casi a diario. Sólo unos pocos de esos actos de valor extremo llegaron a ser recompensados con condecoraciones del más alto rango, como el Corazón Púrpura de los americanos, la Cruz de la Victoria de los británicos o la Cruz de Hierro de los alemanes.Pero también muchos fueron los héroes anónimos que nunca llegaron a recibir ninguna medalla  a pesar de sus acciones valerosas o decisivas. En ese grupo de desconocidos estaban los protagonistas de nuestra entrada de hoy, hasta que llegó la medalla Dickin.



La Segunda Guerra Mundial fue también la Gran Guerra para cientos de perros, palomas, caballos e incluso gatos : fueron usados como guardianes, mensajeros, rastreadores, portadores de provisiones, espías, paracaidistas y hasta (desdichados) kamikazes antitanque…

Fue en 1943 cuando la veterinaria británica M. Dickin, conocedora de la cantidad de actos de valor protagonizados por animales tanto en el mundo civil como el militar, concibió la idea de otorgar un reconocimiento a todos aquellos animales que demostraban, en tiempos de guerra, una gran valentía y una entrega incondicional en circunstancias extremas.

martes, 14 de junio de 2016

El General Patton : Sangre y Agallas

La entrada de hoy está dedicada a uno de los personajes más brillantes, carismáticos y controvertidos de toda la Segunda Guerra Mundial : George Patton, el viejo "sangre y agallas"



George Smith Patton Junior fue uno de los mejores generales del bando Aliado y uno de los más temidos por los alemanes, por su implacabilidad, su dureza y, aunque en menor medida, también por su estrategia. Nació en California, en el seno de una familia acomodada y de larga herencia militar (su abuelo participó en la Guerra Civil Estadounidense por el bando Confederado), desde pequeño demostró un gran interés por la literatura clásica y la historia militar, pese a que su problema de dislexia le causó ciertas dificultades. No obstante, consiguió graduarse en la prestigiosa y legendaria academia militar de West Point.
La vida de Patton previa a la Segunda Guerra Mundial está marcada por su paso por otros conflictos bélicos importantes: Participó en la incursión americana en México que pretendía dar caza al mismísimo Pancho Villa, consiguiendo eliminar al capitán de su guardia personal. En esta curiosa foto de abajo podeis ver a Villa con un joven teniente Patton posando juntos en 1913, pocos años antes de que Estados Unidos declarara a Villa como persona "non grata".

domingo, 5 de junio de 2016

El Tanque Medio M4 Sherman

El caballo de batalla de Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial y uno de los tanques más versátiles de todos los tiempos, nacido con un único objetivo : derrotar a los poderosos blindados de las fuerzas de Hitler.

Historia y Nacimiento
Cuando en 1939 comenzó la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos estaba en clara desventaja en lo que a potencial bélico se refiería. Entre otras flaquezas, su arsenal en ese momento estaba compuesto por pocos tanques, cuyos diseños resultaban completamente obsoletos frente a los potentes e innovadores blindados de los alemanes.
El tanque medio M2 era el diseño más "avanzado" del que disponía en ese momento, y se trataba realmente de un modelo que había evolucionado del tanque ligero con la misma denominación, el M2 Light Tank (en la imagen siguiente podemos ver una formación de tanques ligeros M2A4).

Resultaba obvio que este modelo no alcanzaba al nivel necesario para equipararse a los míticos Panzer, que habían tenido un éxito arrollador durante la campaña de la invasión alemana de Francia y que había dejado perplejos a los generales de otras naciones. Su pequeño cañon pricipal de 37 mm era simplemente "insuficiente" para penetrar los blindajes alemanes; además, su blindaje era pobre (32 mm) y su chasis tenía una silueta o perfil muy elevado, lo que lo convertía en un objetivo fácil de cazar en el campo de batalla.
Pese que a Estados Unidos aún no había entrado en la guerra, la insistencia de algunos generales visionarios como Patton, que ya habían pronosticado que el tanque sería una de la armas más destacadas en la guerra moderna, conllevó al desarrollo de blindados más potentes.

Sobre las Balas Trazadoras

Tras el estreno de la película 'Fury' ('Corazones de Acero') se ha especulado mucho sobre la veracidad de las escenas en las que aparecen las balas trazadoras, las cuales producen un efecto que algunos califican como más propio de ciencia ficción que de 'realidad belica'.

Pero... ¿es realmente exagerado el uso que le da el director David Ayer a las trazadoras en su cinta? ¿Es ese efecto el que pudieron ver los veteranos de la SGM en su día a día?  Aprendamos un poco más sobre este tipo de munición.



¿Para qué sirven?


La utilidad principal de la munición trazadora es muy simple: su objetivo no es otro que "trazar" una guía visual que ayude al tirador o artillero a determinar la posición exacta del impacto y corregir la trayectoria de tiro en caso de que sea necesario.
Uno puede tender a pensar que su uso está restringido al combate nocturno, donde la visibilidad es casi nula. Pero lo cierto es que también se extendió al ámbito diurno por su utilidad para dirigir las ráfagas de ametralladora contra blancos a larga distancia y cuerpo a tierra, situaciones en las que es casi imposible determinar a simple vista donde están impactando las balas

Su funcionamiento y fabricación son muy sencillas : se trata de balas normales en cuya base se coloca una sustancia pirotécnica (habitualmente fósforo o magnesio) que, tras ser disparadas, se incendian con la ayuda de la propia pólvora del proyectil, produciendo una combustión que deja una estela o traza de un color brillante. A la mezcla solía añadirse algún tipo de "colorante" para que pudiera identificarse mejor el tiro.

La munición trazadora tal y como la conocemos hoy comenzó a usarse en torno a 1915, durante la Primera Guerra Mundial, por parte de Gran Bretaña. Su uso resultó especialmente efectivo para abatir los Zeppelines alemanes.  Anteriormente se habían intentado adoptar otro tipo de soluciones llamadas "Spotlight",  que consistían básicamente en balas que explotaban al impactar o producían humo; sin embargo, pronto se descartaron porque resultaban inútiles al disparar a blancos móviles o como fuego antiaéreo, por ejemplo. Tiempo antes se experimentó también con trazadoras que dejaran un rastro de humo, pero su 'composición' hacia que perdieran mucha masa en el camino y esto afectaba gravemente a la trayectoria y fuerza en el impacto.



¿Cómo se usaban?

Al disparar, puede dar la sensación 'visual' de que toda la ráfaga esta compuesta por balas trazadoras... pero lo cierto es que las 'cintas' de balas de ametralladoras montadas en fábrica solían llevar una trazadora por cada cinco unidades de munición normal.  Algunos ejércitos como el soviético añadían más cantidad de trazadoras al final del cargador de ametralladora, con idea de alertar al tirador de que se estaba quedando sin munición; sin embargo, esto también era contraproducente, puesto que también 'avisaba' al enemigo de que el ametrallador pronto iba a tener que recargar.

El uso de componentes trazadoras en la munición se generalizó en casi todos los cuerpos del Ejército : principalmente en los cañones antiaéreos, donde eran imprescindibles para poder dirigir las ráfagas hacia los bombardeos (raids) nocturnos en conjunción con los focos (searchlights). También fue un "estándar" en la munición de ametralladora (sobre todo en la ametralladoras de cazas y bombarderos), aunque también se popularizó su uso en proyectiles de tanques, dado que suponía una gran ayuda para el comandante y el artillero a la hora de corregir las trayectorias. Debemos tener presente que, según el historiador Steven Zaloga,  la distancia media a la que se producían los combates entre tanques era de 800 metros, con lo que este tipo de ayudas visuales resultaban vitales para que los diferentes tanques del pelotón pudieran ajustar mejor sus disparos (era habitual que los jefes de pelotón usaran sólo munición trazadora, para "marcar" el objetivo al que los miembros del pelotón tenían que disparar).

Como en todo, el uso de trazadoras también tenía sus desventajas.




Estelas de proyectiles trazadores durante la noche previa al Día-D. FUENTE: Revista Life
La primera es la más obvia: como se suele decir en el terreno militar, "la trazadora apunta en ambas direcciones", lo que significa que el enemigo también puede saber desde donde se está disparando exactamente y devolver el fuego sobre esa misma posición.  Para suplir esto, después de la SGM se crearon balas de este tipo que 'ardían' tras un pequeño intervalo de tiempo, para no revelar la posición del artillero.
Un detalle muy importante a tener en cuenta es el efecto a largas distancias : dado que el componente "pirotécnico" de las balas trazadoras se va consumiendo en su camino hacia el objetivo, la masa y densidad de las mismas va disminuyendo, lo que provoca que su aerodinámica y trayectoria sea distinta de las balas normales de la misma ronda; en otras palabras, a largas distancias, las balas trazadoras llegan "menos lejos" que las balas normales por su pérdida de masa, dando una sensación equivocada al artillero del alcance real de la ronda.
No sólo eso, sino que en el caso de los cazas de combate que usaban este tipo de munición era muy común el efecto "distracción" : según los informes de batalla, las trazadoras "distraían" la atención del tirador, que se fijaba más en las trazadoras que en el propio objetivo. Conforme fue avanzando la guerra, se entrenaba expresamente a las tripulaciones para que tuvieran esto en cuenta.
Existe, además, un efecto óptico asociado a las trazadoras : desde el punto de vista de un observador que recibe disparos de este tipo, se produce la sensación de que la bala se "desplaza" muy lentamente al principio y, en su trayectoria final y de forma súbita, aumenta su velocidad justo antes de impactar.



También hay que tener presente que este tipo de armamento es, al fin y al cabo, incendiario. Eso provocaba, con mucha frecuencia, que tras los combates y escaramuzas en bosques o en pueblos en los que las casas eran predominantemente de madera, se provocaran incendios por el impacto de la munición trazadora de forma casi involuntaria (aunque las diferentes propagandas afirmaban que el bando contrario había quemado deliberadamente pueblos a su paso).

En conclusión : ¿Se ha exagerado su uso en 'Fury'? 

Es un punto de verdadera controversia y discusión en muchos foros especializados. Estamos tan acostumbrados a ver películas y documentales en los que no se "aprecia" el uso de estas ayudas visuales que verdaderamente "nos choca" ver este efecto 'Star Wars' en una película bélica de la SGM.

A mi también me resultó chocante, para ser honestos. Sin embargo, he tenido en cuenta dos argumentos para su defensa :

  • Primero, el asesoramiento con el que ha contado el director 'David Ayer' : no sólo estamos hablando de asesores de historia militar que han corroborado que las escenas de acción plasman la realidad, sino que también se ha contado con el consenso de algunos veteranos militares, que han secundado el rigor de la película.
  • En segundo lugar, me he permitido visionar algún documental con escenas de combate reales del final de la guerra, y he encontrado este fabuloso video en Youtube sobre una pequeña batalla en Colonia, entre un tanque Panzer alemán y un Sherman y un Pershing americanos.

A partir del minuto 4 podéis ver la escena "estabilizada" para una mejor apreciación de los detalles. Se ve claramente cómo los impactos de ametralladora y sobre todo el proyectil que destruye el panzer dejan una fugaz estela justo antes de impactar, algo que a nuestros ojos sería imposible de ver si no es por la estela de las trazadoras.

Ahora bien, otro detalle a tener en cuenta es si el uso era tan amplio como vemos en la película. Debemos tener en cuenta que la trama se desarrolla ya en 1945, pocos meses antes del fin de la guerra; a esas alturas era muy probable que las fábricas de armamento tomaran como un estándar la inclusión de trazadoras en todas las rondas... pero lo cierto es que la cantidad que aparece en la película se antoja "excesiva".
Además, hay otro punto : el material necesario para su fabricación escaseaba en algunos frentes (el colorido verde, por ejemplo, lo daban las sales de Bario), lo que provocó que, en Stalingrado, por ejemplo, no pudieran emplearse trazadoras por falta de "ingredientes".
En resumidas cuentas, mi opinión es que el uso de las trazadoras es correcto, aunque es complicado determinar si exagerado. Habría que ceder "el testigo" a los pocos veteranos que quedan ya.

Scythe y el universo de 1920+

  Bienvenidos a Europa del Este en unos años veinte muy distintos de aquellos felices y prósperos que nos describen los libros de historia....